4every1 Festival

Este pasado sábado tuvimos la suerte de asistir a la primera edición del 4every1 Festival, que se celebraba en un complejo a la altura de las circustancias como es la Ciudad del Rock (in Rio) de Arganda del Rey y que presentaba un cartel con más de 60 artistas repartidos en 6 escenarios durante ni más ni menos que 16h.

Al lío. Como siempre uno lleva su planning… que luego es muy difícil de cumplir. Cosas del directo. Nuestra idea inicial era entrar a ver a Ricardo Villalobos, así como el increíble despligue tecnológico de los míticos Octave One. Pero por las típicas vueltas propias y las ajenas que nos hizo dar la organización en busca de las acreditaciones, decidimos posponerlo. En defensa de la organización diremos que luego pidieron disculpas y se portaron muy, muy bien.

Total, pasadas ya las 2 de la mañana (sí que retrasamos la entrada sí) nos dirigimos directos al escenario Big Zoológico donde nos esperaba el potente djset electro-rock-dubstep de Modestep. Lo de potente quedó un poco eclipsado por lo muy bajo que en principio sonaba ese escenario. Llegamos al ritmo de “Guilty” de Nero seguida de “Smack My Bitch Up” de The Prodigy. Así sí. Cabe mencionar el momentazo cantando “Another Day”, uno de sus temas más representativos.

A los británicos les seguía uno de los mayores iconos patrios del EDM, que no es otro que Danny Ávila. 1, 2, 3… JUMP! Pese a que admiro mucho la energía que desprende el joven madrileño en sus sets (os recuerdo que me baje yo solo a verle en el pasado Ultra Europe), su sucesión de drop tras drop tras drop no es lo que buscaba en ese momento. Después de un “Tokyo By Night” un poco pasado de vueltas, nos pusimos a buscar techno.

Pillamos rumbo a The Grass, donde nada más llegar el increíble equipo de audio Funktion One de más de 55000W vatios nos recibía e invadía nuestro cuerpo obligándonos a bailar. A los platos, il capoMarco Carola. Buen set del napolitano que, como me dijo alguien antes de entrar, siempre te deja con ganas de más.

Aprovechamos para dar una vuelta hacia Circoloco, y menudo Panorama nos encontramos… Escenario pequeño pero divertido, una dj de la talla de Cassy a los platos, otro equipo de sonido ex-ce-len-te, un techno de calidad… y menos de 100 personas viéndolo. Y nosotros dos los únicos subidos a una tribuna VIP más que desolada.

Volvimos a The Grass, despedimos a Carola y recibimos al que, para mí y sin ninguna duda, fue el mayor protagonista de la noche: monsieurPaul Ritch. No estaba en mi planning inicial y fue el único que me tuvo atrapado durante toda su sesión. Eso es lo bonito de los festivales. Increíble live el que se marcó el francés, elevando el techno a una categoría celestial y deleitando mis (nuestros) oídos como hacía tiempo que no sentía. ¿Recordáis escuchar “Run Baby Run” al cierre? Elegancia en forma de bass. Sobresaliente. (Cierto es que tuvo algún que otro fallo, es a lo que te arriesgas con un live así)

Tomó el timón Maceo Plex. Uno que estaba apuntado hacía meses en mi lista. No sé deciros qué, pero esperaba un sonido más deep house por parte del americano y me encontré mayor (y agradable) contundencia. Eso sí, con el groove que le caracteriza.

Nos dirigimos a Big Zoológico a ver el que para muchos era el mayor atractivo del festival y al que el mismo Maceo llamó meses atrás “el Justin Bieber de la electrónica”. Correcto, Martin Garrix. Y es que la organización sabía que contratarlo sería un pelotazo y, efectivamente, así fue. La mayor afluencia de gente que vi durante el festival fue para ver al joven Garrix. Después de su set en el UMF, yo también tenía ganas de verle en directo y juzgarle más allá de SU canción. Set EDM con todas las de la ley donde se sucedieron todos los temas que debían salir a la palestra (enlazó un par de Guetta para locura generalizada) ante un público entregadísimo a la causa. Terminó el set con sus amiguitos Jay Hardway y Bassjackers a la espalda, y así amanecimos con fuegos artificiales. No estuvo mal, no. Lo más doloroso fue perderme el momentazo “Animals”, porque puedo dar por hecho que lo hubo.

Volvimos ya por última vez a The Grass donde Maceo daba sus últimos coletazos dejando hueco al queridísimo Paco Osuna. He de decir que no le había visto aún y mil ganas tenías. Y terminar un festival ya con el sol bien alto al ritmo de bombo que marca Paquito es una auténtica barbaridad. Buen pollo montó de buena mañana. No me extraña la legión de fieles seguidores que tiene a sus espaldas… y menos sabiendo lo que gusta el techno en este nuestro país. Chapó.

Varios artistas se nos quedaron pendientes, pero eso ya, será otra historia que contar. En resumen, buena noche de la primera edición de un festival que parece viene para quedarse. Afluencia escasa para el recinto en sí y para la que habían preparado, así como algunos problemas fácilmente solucionables. Destacar la variedad musical que presentaban y las asombrosas prestaciones de audio (bueno, Big Zoológico ahí ahí…), así como el amable y atento trato de la organización en todo momento.

Familia…** ¡Nos vemos en 4every1 Festival 2015!**

Nota: como siempre, mencionar a la gente que hace que nos acompaña al festival y hace que sea especial: Frade que al fin se vino, Davicin y su cultura musical, Jorge y su gente de Toledo y (ya que estamos) las chicas de Radio 3. Próximamente más… y mejor.