22 y 23 de junio de 2018, fecha que quedará permanente en la memoria de todos los que pudimos asistir a la cuarta edición de A Summer Story que, sin duda, se corona como la mejor de todas sus ediciones, así como la más multitudinaria. 80.000 almas pudieron disfrutar de un cartel de lujo, un espectáculo audiovisual sin precedentes en la Comunidad de Madrid y todo un despliegue de infraestructuras. Pero empecemos por el principio.
VIERNES
El número de coches en el parking de la organización ya hacía presagiar que la asistencia iba a superar con creces la de pasadas ediciones. No era para menos. Inside City, el Main Stage de esta edición, presentaba un line up suntuoso y todo apuntaba a que Amelie Lens, Loco Dice y Paco Osuna serían los triunfadores de la noche, solo superados por el tan esperado B2B de Joris Voorn y Kölsch.
Acercarse a la entrada minutos previos a la actuación de Amelie Lens era sinónimo de larga espera y, dentro, primer momento de la noche en el que el casi todo el público se concentró en el escenario Inside City. Ella, que en poco tiempo ha pasado de ser una Dj en el anonimato a ser una de las Dj techno que todos los grandes eventos reclaman a nivel internacional. Sin duda, su set fue el mejor de la noche. No hubo sorpresas, sesión contundente, algo a lo que ya nos tiene acostumbrados. Beat tras beat, hizo que nos dejásemos las piernas en la pista y que nuestra mente volase en una burbuja de techno intenso. Pocos Dj´s pueden hacer que uno se abstraiga de la realidad y sienta realmente la música que nace de sus manos.
Como días antes nos anunció, Dj Nano haría saltar y bailar a Madrid poniendo a prueba su flamante nuevo disco y la acogida fue más que notable. Coincidiendo con la entrada masiva de asistentes, que se suele producir en todas las ediciones entre las 00:00 y 01:00, el madrileño gozó de un público entregado y fresco de piernas que no pudo parar de bailar durante todo el set con la energía, los cambios de ritmos, melodías, hits y ganas que se transmitían desde cabina.
Destacar también el homenaje que Nano realizó a nuestro querido Avicii. Fueron alrededor de 15 minutos de contener la emoción, de cantar con el alma y bailar por encima de la tierra, canciones como Wake me up o Levels, que nos pusieron la carne de gallina. Gracias Nano y gracias A summer Story por el #MemorialAvicii, demostrando que la música electrónica es mucho más de lo que los haters siempre venderán.
Siguiendo en Burn Village, llegaría el bueno de Fedde Le Grand. Los ritmos más eléctricos continuaban en una sesión de las habituales en el holandés. Uno de los más queridos del cartel, y de todo el circuito Mainstream, mostraba ante el griterío de la Ciudad del Rock toda su artillería junto con su MC habitual. Tracks como Rhythm of the Night, Coco´s Miracle o No Good producidos por él nos llevaban años atrás. Una sesión sin riesgos para el veterano Dj que siempre intenta poner un puente en sus sesiones entre el EDM y el house.
Maestros de ceremonia allá donde vayan, han hecho de sus nombres, marca. Loco Dice y Paco Osuna volvieron a generar expectación máxima. Tanto fue así, que Inside City llenó de nuevo cada rincón.
Los puritanos del techno dirían que ambas sesiones fueron muy tech-house, otros, sets techno cargados de grooves y algún que otro tema tech-house. En cualquier caso, sonidos que nos recuerdan a la isla blanca y que hacen que su público vibre con cada acorde. Pero hubo algo que, ya desde la publicación de los horarios, causó algo de desconcierto; Sus sets no fueron malos, ni mucho menos, pero nadie entendía que ambos interviniesen después de Amelie, teniendo en cuenta que pincharía con la energía que le caracteriza. Mucho menos se entendía que ambos sets fueran de la mano, en cuanto a intensidad y velocidad, teniendo en cuenta que se acercaba el cierre. Lineales en exceso. Los clubbers más experimentados echaron de menos la subida progresiva de Bpms en ambas actuaciones.
Llegaba una de las actuaciones más reclamadas del festival, el momento del Psytrance de Vini Vici. Desde el primer momento pusieron las cosas claras; Great Spirit para empezar, poca broma. Pudimos ver a un público que disfrutaba atónito el tremendo sonido que sacaban del equipo montado para esta ocasión. Nunca antes había sonado tan bien Played of Alive de Safri duo en la capital, apabullante.
Con la gente en sus manos, el dúo estaba convencido de que su sesión sería recordada, sin bajar los BPM del trance clásico y progresivo que les caracteriza. Las mezclas iban saliendo y el lugar se convertía en una escabechina. El sábado se notaría tanto salto. Disfrutamos de remezclas a temas como Clint Easwood de Gorillaz o Zombie de The Cranberries.
Para coger el relevo y mantener el Trance en el escenario, salió el gallego Dim3nsion. Uno de nuestros artistas más respetados internacionalmente, un orgullo. Con una iluminación que favorecía mucho, el Dj nos mostró la fusión que le gusta hacer del genero Trance, por un lado temas propios muy melódicos como Origami o Mangata que nos elevan a otra dimensión y tracks como Adagio for strings más eufóricos que siempre van en la selección de Borja Iglesias.
Joris Voorn B2B Kölsch
Y llegó el tan esperado cierre. Joris Voorn y Kölsch fueron los encargados de poner el broche final a la noche del viernes. Compenetración absoluta entre ambos, perfect match; Joris sigue evolucionando e introduciendo cambios, aunque se mantiene fiel a su sonido estético. En esta ocasión, puso la nota melódica y vocal del set, incluyendo remixes de canciones que poco tienen que ver con el mundo techno. Kölsch, el techno elegante a la par que raro y experimental que le caracteriza, ese que envuelve al público desde el inicio. Sin embargo, los espectadores volvieron a sentenciar. A pesar de ser una de las actuaciones más esperadas de la noche, el set no estaba a la altura de un cierre de un festival que abarca tantas horas. A las 7:20 a.m., la pista de Inside City comenzó a despejarse poco a poco, el dúo sonaba a progressive trance y, para algunos, aguantar hasta las 8:00 a.m. se hizo misión imposible.
SÁBADO
Día grande para todos. Amantes del underground, del Remember y del EDM se frotaban las manos. El día grande era el sábado y, a pesar del cansancio, el line up bien merecía recuperar fuerzas para disfrutar de todo un lujo de actuaciones. Las expectativas estaban por las nubes y no era para menos:
Meses. Eso es lo que miles de jóvenes llevaban esperando.El momento en el que los suecos aparecían en escena había llegado. Por fin, el hype era altísimo, pero no defraudaron.
Aquello fue una oda a la música Mainstream y a la fiesta. El 23 de Junio era la noche de San Juan para el resto de España, para los allí presentes, era la noche de Axwell /\ Ingrosso.
Dj´s y espectadores lo dieron todo durante hora y cuarto. Con ambos en los platos se batió record de asistencia en el Main Stage. Durante estos cuatros años, nunca antes hubo tanta gente. Increíble. Y de repente sonó "Somebody That I Used to Know" (Calling Remix) con uno de los himnos de la música electrónica creados por Sebastian Ingrosso y Alesso. Calling es uno de esos tracks que están tocados con una varita mágica que de repente llegan y te llenan.
La pareja, anteriormente trío junto con Steve Angello, tiene tanto repertorio que puede que dejen un tema sin sonar, pero no esa noche del 23 de junio. Aquella noche no. Un set que será recordado por miles de asistentes. More than you Know, Don´t you worry child, Dreamer, Sun is shining. La lista es interminable...Una pena que aquello se acabara. Solo podemos pedir una cosa, que los traigan otra vez.
Reeko B2B Lewis Fautzi
Maceo Plex da por terminado su set y observamos, incrédulos, cómo la pista de Budweiser Town se vacía, literal. Ver para creer. No es la primera vez que ocurre en un evento de esta u otras características, y si no, que se lo pregunten a Surgeon.
Turno para Reeko y Fauzti, combinación capaz de de elevarnos hasta el infinito. Hablar de PoleGroup es hablar de techno sin aditivos. La mezcla del techno hipnótico de Lewis junto con los sonidos contundentes, a la par que elegantes de Reeko, hicieron las delicias del público. Derroche de energía durante 90 intensos minutos. Buen momento para despertar del letargo en el que se sumieron el viernes todos los amantes de los sonidos más underground.
Movimiento horario de última hora. Todos esperábamos a Surgeon & Lady Starlight pero allí, como si de una deidad se tratase, apareció aquel al que muchos llaman mesías: Óscar Mulero.
Su presencia es siempre una apuesta segura gracias a su constante evolución. Su set, cargado de experimentos con la oscuridad más profunda, bombos pesados y hit hats, crearon una atmósfera mental que obligaba al público a volar entre el sonido. Pero, ¡ojo! Al contrario de lo que muchos pensaban, no bajó los bpm´s. Consiguió que el viaje no solo fuera mental, sino también físico.
En anteriores ediciones de A Summer Story hemos tenido sensaciones encontradas con el siempre sonriente Armin Van Buuren. Es cierto que tenía una tarea muy difícil, salir después de los suecos y mantener el nivel. Pues lo logró. El cinco veces ganador de Dj Mag hizo una sesión cargada de Trance muy al gusto del público y nos llevó de viaje con sus grandes melodías y tracks. Uno de sus nuevos temas está teniendo una gran acogida allá donde lo pincha, Bla Bla Bla, nos hizo cantar a todos. El holandés sigue siendo una apuesta segura y una visita obligada dentro de un festival.
Llegó el momento más canalla y salao de la noche. Dj Nano volvía a reventar de público el escenario de Oro Viejo. Como es habitual, allí nos encontrábamos y danzábamos veteranos y noveles. Todos a la voz de Dj Nano. Coincidiendo con el cierre de Dimitri Vegas & Like Mike la gente se agolpaba para, aunque fuera ver de lejos al madrileño. Difícil decisión deberán tomar, porque de seguir esta progresión, Oro Viejo necesitará una ampliación o estar en el Main. Volviendo a la sesión, Nano hizo lo de siempre. Bailar más que nosotros, no se cansa y nos encanta.
Dj Nano nos hace recordar tiempos pasados en el que el remember era presente y no recuerdos. No te has pegado una fiesta de verdad si Nano no te ha gritado, ¿Dónde están esos brazos arriba?
Oro Viejo sigue siendo igual de bueno que siempre, es el plato favorito que te prepara tu mamá o papá con amor, puedes tener más o menos hambre, pero siempre lo vas a gozar.
Let the light shine in.
Que se pare el mundo, que yo me quedo con Rebekah. Este fue el sentir general 10 minutos después de que la de Birmingham agarrase los mandos. A pesar de que había sido una gran noche de techno, a muchos les hacía falta ese Buah, ¡fue brutal! y, sin duda, esa medalla la obtuvo ella.
Fiel a su estilo duro, contundente y lleno de samples, la incontrolable Dj hizo que el público se dejase el cuerpo y el alma con su sesión. Su techno no entiende de modas, aquello no parecía A Summer Story sino una experiencia rave.
Eran las 8:00 y dio fin a su set, pero de allí no se movía nadie. Todos querían la última, aunque no pude ser. Aún así, si nos centramos en el área techno del festival, su set fue el mejor del fin de semana.
Como os contábamos al principio, esta edición ha sido la más multitudinaria y especial. Hace ya cuatro años, Beatsoup recogió con gran ilusión la noticia de un nuevo festival en Madrid. Les hemos visto nacer, crecer y estamos siendo espectadores en primera fila de su transformación en un gigante. La progresión es imparable.
Para la quinta edición estamos convencidos que nos vamos a encontrar con un line up que nos hará peregrinar de nuevo hasta Arganda del Rey y que le dará mayor repercusión internacional. A Summer Story ha sido, una vez más, un regalo para empezar el verano. Gracias a todos por crearlo y por cuidarlo, porque organización y público es la unión que hace de un proyecto, un éxito. ¡Nos vemos en 2019!