Sónar+D Una mirada al futuro
Pocas veces atenderemos a un Sónar Barcelona con una amplitud de horizontes tan variados e interesantes. En su apuesta por estar a la cabeza de la vanguardia tecnológica y social, Sonar+D hace gala este año de un tríptico titánico que sin duda alguna será de una trascendencia icónica en todo el mundo para este 2017.
Conformado por 100 actividades, 180 oradores y cerca de 5.000 profesionales acreditados de 60 países, Sónar+D ha impactado este año, empezando por la apuesta de la artista islandesa Björk, la cabeza visible de todo este enmarañado de tendencia y tecnología, ofreciendo 3 sorprendentes actividades. Un DJ set al puro estilo Bjork, un seminario sobre su particular forma de entender la fusión entre arte y tecnología y una experiencia de realidad virtual emplazada en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) que podrá disfrutarse hasta el 24 de septiembre.
Otros protagonistas de la feria fueron Google, quienes entraron al trapo de la Inteligencia artificial, para tratar temas que verán una temprana acogida como la automatización, los “bots” o las conexiones entre la IA y el ámbito de la creatividad. La piedra angular de su discurso ha sido la información masiva, y qué aplicaciones tendrían en un futuro, temática no apta para los más escépticos y humanistas y sí perfecta para los más vanguardistas.
Pero este año el festival ha optado por un ingrediente más, como es abrir al público general una selección de actividades +D para disfrute de todos. El ejemplo lo tenemos en el Maker Faire Barcelona, un evento gratuito de tecnologías “Do It Yourself” que se celebró en Fira Montjuïc el sábado y domingo. Y Una auténtica bestialidad de estands ubicados en Sónar Dia, que recogía para disfrute del interesado las apuestas tecnológicas de todas las grandes marcas de tecnología musical, de modo que, si querías probar esa flamante Model One de Allen & Heath, solo tenías que colocarte los cascos y elegir entre vinilo o cd para pinchar tu media hora, y así con más de 50 marcas y dispositivos diferentes.
Otra apuesta que no podíamos olvidar es la de Sónar Planta, siendo uno de los espacios más experimentales del festival, Daito Manabe nos introducía en un espectacular juego de luces y sensores luminosos mediante unas bolas que podíamos manipular con nuestras manos para direccionar los focos al tiempo que su movimiento generaba sonidos eléctricos, ¡Toda una experiencia!
Si este año Sónar+D ha puesto toda la carne en el asador creando verdadera impresión a todo el público de una forma sublime, preparaos para el año que viene, porque el 25 aniversario de Sonar Barcelona en 2018 va a ser monumental.