Krewella derrocha energía en Massive Madrid

El pasado viernes volvimos a la madrileña Sala La Riviera a una cita que se antojaba como especial, ya que la segunda edición de Massive Madrid (os recordamos el debut con Flux Pavilion y Bingo Players) contaba con la presencia por primera vez en la capital de las hermanas Yousaf, más conocidas como Krewella. Y no siendo escaso el elenco de fans / KREW con el que cuentan a sus espaldas, ambiente no iba a faltar.

Entramos a eso de la 1:30 cuando Aitor Mv tomaba el mando de una sala bastante llena para la hora que era y lo visto en otras ocasiones. Un warm-up de noventa minutos con una exquisita selección de tracks saliéndose de los hits actuales de radio, donde recorrió varios estilos, del future house, al progressive house y el electro house, y rescatando del baúl varios clásicos que nos sacaron una sonrisa como “Vamos A Jugar En El Sol / Show Me Love”. También sonaron uno de los temazos del año como es “Treasured Soul” de Michael Calfan, el himno “This Is What It Feels Like” de Armin van Buuren o “Azidic” del presente entre el público Miguel Robles, que realmente suena MUY bien en sala. Y es curioso mencionar esto, porque una vez más (y hemos perdido la cuenta) hemos de remarcar que el sonido de La Riviera no está a la altura de los eventos que alberga semana tras semana. La nota negativa de este tramo de la noche es para el público (digamos un poco bastante posser) que nublado por el fanatismo pedía sin descanso a las hermanas Yousaf, improvisaba descordinados cánticos y de una forma u otra perdía el respeto a un dj residente que lo estaba haciendo la mar de bien.

Se acercaban las tres de la mañana en el reloj, y se notaba por el movimiento de gente que se intentaba acercar a primera fila. ‘Apareció’ Krewella en el escenario ante un griterío generalizado que bien podía partir un cristal, y decimos ‘apareció’ porque entre unas personas subidas a otras (y a otras) y todo el mundo intentado grabar el momento móvil en mano (incluso haciéndose tapones dignos de la NBA unos a otros) no veíamos demasiado. Para muchos, en ese mismo instante empezaba la noche con la que llevaban soñando ya muchas semanas. Set muy intenso, nos arriesgaríamos a decir que pre-grabado, donde toda la estructura se basaba en una concatenación de temazo tras temazo, bote tras bote, sin dar descanso alguno a un público más que entregado a la causa. EDM y dubstep fueron los ingredientes principales, aderezados con algo de trap y clásicos rock. Recordamos desplegar todo su arsenal con “Legacy” (encadenado sorprendentemente “Everytime We Touch” de Cascada), “Human”, su nuevo “Somewhere To Run”, “Enjoy The Ride”, “Alive” para el cierre y “Come & Get It” para el re-cierre. Si algo podemos destacar de Jahan y Yasmine (quien acabó con la camiseta del Real Madrid con su nombre y un gorro de minion, enamorando a más de uno) es el increíble derroche de carisma y energía del que hicieron gala, jaleando al respetable en todo momento e incluso acercándose al final del set al límite del escenario para tomarse una fotografía con toda su ‘Spanish Krew’ allí presente (arriesgándose casi a ser secuestradas, ¡vaya alboroto levantaron las guapas hermanas!). Y ya si hubieran cantado algo en directo… pero eso es otra historia.

Pusieron rumbo hacia sus camerinos donde algunos afortunados pudieron tomarse una foto con ellas (como nuestros amigos de Wololo Sound, ¡os invitamos a leer su crónica!), mientras tocaba el turno a Exzessive con la difícil papeleta de mantener el ritmo a golpe de trap ante la desbandada general de un público más que satisfecho con lo que había ido a hacer, que no era otra cosa que bailar descontroladamente al son de Krewella.