No es una afirmación con la que nos jugaríamos la mano ya que este tema ha dado muchas vueltas durante los últimos años, pero esta vez... parece que va enserio.
La temporada ibicenca es muy larga y todos los que hemos estado allí, sabemos que arrastra otros temas más allá de la música como por ejemplo, ruido, mucho ruido.
En esta ocasión funcionarios del Ayuntamiento de Sant Antoni (una de las zonas más concurridas de Ibiza) han prohibido que los clubes permanezcan abiertos más allá de las tres de la mañana, esto es una clara respuesta con mano dura al ya denunciado "turismo ruidoso" que se genera en San Antonio. A pesar de ser una de las ciudades con más turistas del mundo durante varios meses, el Ayuntamiento quiere adelantar el toque de queda que existía y adelantarlo a las 3 am y no a las 5 o 6 am como estaba hasta ahora.
A parte de los clubes y discotecas, esta nueva regla también garantizará que las terrazas al aire libre se despejen a las 23h de la noche, en lugar de las 2h de la madrugada. Lo que quieren mediante esta norma es alejar Sant Antoni de la "contaminación acústica sin afectar a la economía local"... términos que desde nuestro punto de vista, son inviables. Además, los restaurantes, tiendas y otros lugares que sirven alcohol tendrán que dejar de hacerlo a partir de las 23 horas de la noche.
La Zona de Protección Acústica Especial, (competencia del Ayuntamiento de la zona), permite un período de gracia de seis meses para que los clubes cumplan con las nuevas normas de "insonorización". Las nuevas aperturas de clubes, bares o locales en esta zona, no se llevarán a cabo si no se cumplen los niveles de restricción de ruido. El objetivo es reducir la contaminación acústica en el área de 85.9 a 55 durante el tiempo de descanso.
El consejo local debe hacer cumplir estas nuevas reglas, ya que el alcalde de Sant Antoni, Josep Tur, quiere mejorar la imagen alejándose de un turismo tan "ruidoso" y velando por el bienestar de todos.