The Black Madonna, Joey Negro y Project Pablo cambian sus (racistas) nombres
¿Te suenan The Black Madonna, Joey Negro o Project Pablo? Olvida esos nombres, no volverás a escuchar música bajo esos alias. Es la hora de The Blessed Madonna, Dave Lee o Patrick Holland. 2020 está siendo el año de muchas cosas, entre ellas de mucha tensión. En algunos casos, innecesaria. La hipersensibilidad anónima a flor de piel. Que vayan temblando Black Asteroid o Black Sun Empire, y el bueno de Atkins que no tiene mucha cara de Juan...
En los últimos días hemos visto como, en cadena, estos tres reconocidos artistas han decidido (¿o se han visto obligados a?) cambiar sus alias principales sucumbiendo a las presiones que los acusaban de racismo o apropiación cultural. "Miembros de la comunidad latina me habían contactado públicamente y en privado, para expresar su incomodidad hacia mi alias y enseñarme que usar el nombre "Pablo" es dañino y inapropiado para una persona blanca, no latina o hispanohablante" explica el canadiense Patrick Holland en su comunicado.
Eso sí, sin mucho fundamento ni fuerza (¿apenas 1.000 firmas en Change.org sirven?). En el caso de la americana Marea Stamper, su apodo The Black Madonna venía de su fe, "el nombre era un reflejo de la larga y profunda devoción católica de mi familia al tipo específico de icono europeo de la Virgen María, que tiene un tono oscuro". Para el británico Dave Lee, fue incluso más casual basado en sus vinilos: "normalmente no tengo problema a la hora de pensar en nombres, pero simplemente no se me ocurrió nada y el sello dijo que realmente necesitaban todos los créditos para el final de la semana. Tenía un montón de discos al lado de mi escritorio en el trabajo, entre ellos estaba Pal Joey "Reach Up To Mars" y J Walter Negro "Shoot The Pump"".
"A la gente que comparte esa devoción les encantó el nombre, pero mirando hacia atrás, debería haber escuchado con más atención otras perspectivas. Pero ahora escucho fuerte y claro. Mi alias ha sido un punto de controversia, confusión, dolor y frustración que distrae de las cosas que son mil veces más importantes que cualquier palabra en ese nombre." — Marea Stamper, The Blessed Madonna
"He explicado la historia de cómo sucedió y nadie ha dicho nada en el sentido de que lo consideraran ofensivo o que debería cambiarlo, de hecho, todo lo contrario. (...) Obviamente no soy negro y estaría mal si fingiera serlo. No creo haber vendido más discos porque la gente pensaba que era negro pero acepto totalmente que podría haber confusión" — Dave Lee
"He contribuido a la supremacía blanca y constantemente me beneficio de mi privilegio blanco; mi ego me ha impedido reconocer esto. Aunque nunca tuve la intención de ofender o tergiversar a las personas marginadas con mi apodo anterior, la verdad es que lo hice" — Patrick Holland
Absurdo. Tres artistas con recorrido y principios, que han usado ese nombre durante años sin que llamara especialmente la atención si bien es cierto que las cosas están cambiando. Djs y activistas —ya sea desde We Still Believe o Apoyando a Coast Protectors— que han luchado a través de su música por preservar la cultura clubbing como era en sus orígenes: libre, diversa, inclusiva, comprometida, rebelde, comunitaria. ¿Son realmente culpables? ¿Merecen escarnio público? ¿Deben disculparse por ello? Solo si están convencidos, adelante.
"Lamento haber causado alguna ofensa. He dedicado mi vida a la música, pero particularmente a la música negra. Amo el soul, el funk, la música disco y el jazz de una manera que para mí es imposible articular en palabras y he tratado de defenderlo siempre con las mejores intenciones" — Dave Lee
El racismo es un problema capital, global y real, que debe ser combatido de base desde todos los niveles. La música —incluso especialmente la escena electrónica real, nacida de las raíces de la música negra y crecida como refugio de las comunidades marginadas afroamericana y homosexual— es un poderoso arma con el que enfrentarse a los problemas sociales, ya lo hemos visto antes. Eso no es cuestionable. La duda entonces ya no reside en su culpabilidad, sino en saber si estos problemas más menudos desviarán la atención del objetivo principal. Que se llamen como quieran, su música (y sus acciones) marcarán el camino.
—PD (la propia de The Blessed Madonna en su comunicado): "Si has leído hasta aquí, arrestad a los policías que asesinaron a Breonna Taylor en mi ciudad natal Louisville, Kentucky".