El festival madrileño A Summer Story encara este año el apasionante y exigente reto de consolidarse como una referencia en los festivales de la Península, después del sobresaliente debut del año pasado. Aunque aún estemos en el frío enero, se ve que hay muchas ganas de vivir una buena historia de verano, tanto en la organización como en el público. La pasada semana la promotora Disorder Events presentó la nueva imagen del festival reservando para el domingo la puesta a la venta de una tirada promocional de 2500 abonos, al más que asequible precio de 20€, que se agotó en algo más de una hora. Setenta y siete minutos para ser más exactos. ¡Ay señora, que se los quitan de las manos!
Pero la ciega confianza demostrada por aquellos que ya atesoran una entrada se ha visto recompensada esta misma tarde con el descubrimiento de los dos primeros artistas, de estilo muy distinto, que se darán cita en la madrileña Ciudad del Rock los próximos 25 y 25 de junio.
El joven holandés Oliver Heldens fue uno de los artistas más solicitados en la pasada edición de A Summer Story, por lo que la organización ha querido satisfacer la demanda y convertirle en el reclamo inicial del Summer Stage, siendo la primera vez que se podrá disfrutar en Madrid del máximo exponente del sonido Future House.
El primero de varios lives que podremos disfrutar en A Summer Story recae en Paul Kalkbrenner, un viejo conocido de la organización pues fue el mayor héroe de la exitosa primera edición de Madrid Winter Festival hace ya más de dos años. Con su visión única y exquisita del Techno, sonido de Berlín, y su nuevo álbum ‘7’ bajo el brazo el alemán se convierte en el primer gran atractivo para el público underground que abarrotará el Winter Stage.
Esta pareja de ases apenas abre el camino de un cartel que pretende mejorar el de la pasada edición, una tarea difícil. Sin duda, un muy buen arranque que no hace más que aumentar las expectativas. El engranaje de A Summer Story ya funciona a toda velocidad, y no parará hasta junio. ¿Te apuntas?