Después de seguir como habían ido desfilando por la Sala La Riviera nombres de la talla de Regal, Nastia, Fatima Hajji o Perc, el pasado viernes no pudimos resistirnos al encanto de Ekho Club y nos apuntamos a su ritual de viernes para bailar al son de Anfisa Letyago. La dj napolitana de adopción es una de las nuevas grandes figuras femeninas del techno europeo. Si bien lleva tiempo a gran nivel, su último lanzamiento en un sello mítico como Kompakt —Speicher 118— y su set con Malta a sus pies de la mano de Cercle han terminado de disparar su popularidad. Y razones para el éxito no le faltan a la chica.
Pero empecemos por el principio. Raúl Ortiz bajo su aka Overmono era el encargado de abrir la sesión e ir calentando a fuego lento la pista de baile, para que poco después llegase Nuke —quien se cambió el turno con su socio César Almena— para subir el fuego y los bpms dejando todo listo a la invitada principal.
En una sesión de dos horas, Anfisa Letyago desplegó sus encantos —sonrisa inocente, bombo percutor y mucho baile— ante un público joven y entregado. Un recorrido en el que fue subiendo el ritmo, desplegando producciones propias y ajenas, del techno hasta el psytrance, dándolo todo hasta salir vitoreada. Y es que allí no paró de bailar ni la mítica palmera del centro de la sala.
Tomaba el mando el otro anfitrión —ahora sí— César Almena, que no bajó el pie del acelerador hasta el final, llevando en volandas a los valientes que aguantaron hasta el final.
Pero la cosa no queda aquí. Hoy mismo hay nueva cita con Rodhad, incursión el el house la próxima con la visita de John Summit para luego volver al redil techno de Pan-Pot antes de las fiestas navideñas. Con la sombra de nuevas restricciones merodeando, la programación de Ekho —club satélite de FABRIK en el centro de la capital— es sin duda una buena apuesta que no podemos dejar escapar. Dicho esto, nos vemos en la pista.
Muchas gracias a Adrián y todo el equipo de Ekho por las facilidades.
