Avisamos en la previa, y no nos equivocamos. La visita de Joris Voorn a Madrid, una más para su ya amplio historial, fue un must en toda regla. La de veces que hemos visto al rubio en todo tipo de enclaves —no en vano es uno de los artistas fetiche en Beatsoup— y de la del viernes pasado en Bassement de la mano de Umamii nos acordaremos una buena temporada. Y de paso, os la contamos. Al lío.
El dúo residente Night Stories, a quién precedió Miriam Rivera, nos sirvió un buen calentamiento a base de melodías sabiendo lo que seguía. Apareció puntual en la cabina un Joris Voorn con su set up habitual que poco a poco fue cogiendo el pulso a la sala y al público que ocupaba cada metro cuadrado de la misma. Una sala —Bassement— con un formato que que pareció gustarle, pues poco a poco vimos como el gesto serio y concentrado con el que empezó, con su habitual mirada al frente, se iba tornando en sonrisa picarona hacia el público. Había venido a jugar, y la posición de la cabina a pie de pista —al alcance de la mano de los fieles allí reunidos— y el buen equipo audiovisual de la sala le dieron alas en un club bien disfrutón.
El discurso musical, fiel a lo esperado, bailaba —como todos los presentes— en torno al techno y el house, con el groove y las melodías como principales protagonistas a través de una selección que tocó muchos palos bien hilados y nos dejó varias sorpresas. Puro umami. Por allí sonaron Bart Skils, Richie Hawtin o Yotto, e incluso se animó con algún guiño en español con el "Ella Dice Que Sí" de Mendo, pero también con un mash up de la vocal de "Levels" de Avicii con "Pegasus" de Spada & Malov en su propio sello Spectrum —que buen catálogo gasta como bien demostró a lo largo de la noche— fue un bombazo que no vimos venir. Hacia el final no dejaron de sonar éxitos propios, que tiene unos cuantos, como "Antigone", el remix a "Transmission" de Eelke Kleijn y clasicazos siempre bien recibidos como "Goodbye Fly", "Ringo" o su remix a "Dark Flower" de Robert Babicz que ya hacía tiempo no escuchábamos. Por sonar, hasta sonó su edit al "With Or Without You" de U2 —con el que hace unos meses nos despidió en Maudes Festival en esta misma ciudad— y que dio un respiro necesario en la sesión de crossfit que allí dentro nos marcamos.
Antes de entrar ya sabíamos con qué nos iríamos a las seis de la mañana, y era con una sonrisa satisfecha en la cara y los brazos al aire con el cierre al son de su nuevo "You & I" junto a Nathan Nicholson, que ya apunta a himno. Y así fue. Ovación merecida, y es que el bueno de Joris nunca falla. No nos perderemos la próxima visita... tú tampoco deberías. En la cola del ropero nos comentaba un chaval de Murcia que acababa de mudarse a Madrid y era su primera noche allí —afortunado—, seguro que ya sabe dónde debe volver. Próxima parada: Laster.
Fotos: Frank Emous @femous